Corría el año 1987. En la Argentina se vivían los primeros años de la nueva etapa democrática; la moneda era el Austral y la economía se debatía en la lucha contra la creciente inflación; el fútbol vivía la satisfacción reciente de haberse consagrado campeón del mundo un año antes con un Diego Armando Maradona esplendoroso; quienes conformaron la junta militar del llamado Proceso eran condenados por delitos de lesa humanidad y el sindicalismo desarrollaba una estrategia de confrontación con el gobierno de Raúl Alfonsín con numerosos paros generales.
Ese año, Carlos Avila, por entonces un ascendente productor de programas deportivos cierra un acuerdo para emitir las imágenes del fútbol argentino en su programa Fútbol de Primera y formalizaba un pago por esos derechos de US$ 7 millones.
La evolución de ese negocio fue fenomenal: pocos años después, con la llegada de la TV paga, los derechos pasaron a ser por la emisión en vivo de algunos partidos primero y de cada fecha después; la productora de Avila se convirtió en Torneos y Competencias, que derivo en la producción de cada partido, organización de eventos y manejo de imagen de los clubes del fútbol argentino; se creó un canal, TyC Sports, que formó parte de la arquitectura del negocio del fútbol por TV.
Desde entonces la historia de las emisiones del fútbol argentino encerró capítulos con matices donde se incluyen intereses económicos –mayormente, políticos y de poderes, que hicieron que todo fuera derivando por distintos caminos. Lo que nunca cambió fue el interés que despertó el fútbol. Paralelamente, el modelo de la televisación del fútbol, se replicó en otros países de Latinoamérica.
En el 2009, el Estado argentino compró los derechos después que AFA rompiera unilateralmente el acuerdo que tenía con Televisión Satelital Codificada. El monto en aquel momento del acuerdo fue de US$ 100 millones ($ 600 millones de pesos). El programa Fútbol para todos estuvo vigente sostenido políticamente hasta la actualidad.
El gobierno actual decidió terminar con el programa porque que es su intención reducir gastos del Estado. Y así nace lo que se da en llamar, una nueva era en el fútbol argentino.
Tras pagar US$ 250 millones de dólares, entre un canon para acceder a los derechos y el valor del primer año. De todos modos, en una primera etapa cuya terminación aún no está definida, los partidos se emitirán por los canales básicos.
Fox Networks Group y Turner Broadcasting System ganaron la subasta privada que se realizó para entregar los derechos y en principio emitirán los partidos por las señales Fox Sports 2 y TNT dentro de los paquetes básicos.
Desde octubre (será al principio del mes o a final de mes), la emisión de los partidos pasará a ser en los paquetes Premium de los operadores, por lo que los usuarios para acceder al fútbol deberán pagar el abono básico, contratar el paquete HD y el costo Premium del fútbol.
Cuando las emisiones pasen al pack Premium, a través de las señales creadas Fox Sports Premium y TNT Sports, solo se mantendrán la transmisión en vivo por el básico de dos partidos.
Se prevé que se abrirá también la comercialización de las imágenes por streaming y para móviles.
Controlar la reproducción vía online, sin pago de derechos, es una de los desafíos que se plantean los programadores y distribuidores.
Dentro del business plan de los tenedores de los derechos, prevén que en el primer año consigan que dos millones de usuarios contraten el servicio.
© iPuntoTV 2017
